martes, 4 de julio de 2017

¿Te dedicas tiempo?


Nos encontramos inmersos en un mundo que demanda una absoluta entrega de nosotros por todas las actividades que hacemos a diario, como ir al trabajo, hacer faena en el hogar, buscar a los niños al colegio, hacer algún deporte, etc. Este habito lo hemos convertido en parte de nuestra realidad,  tanto así que justo antes de irnos a dormir vemos tv, nos conectamos a Internet o buscamos un ratito extra para intentar completar alguna tarea pendiente y poder irnos a la cama con la pseudo satisfacción que sacamos el máximo provecho del día o en su defecto, una sensación de malestar  si no pudimos completar dicha tarea.

Cuando no sabemos organizar nuestro tiempo, la vida nos parece un caos. Todos nuestros compromisos y deberes se vuelven inmanejables, aumenta el estrés y comenzamos a sentirnos abrumados como con ganas de salir corriendo y olvidarnos de todo el rollo; en fin, eso se soluciona con una buena planificación, tomando en cuenta que el día tiene 24 horas, (1440 minutos diarios para todos) de las cuales 8h empleas para dormir (si es que lo haces) y 16h que te sobran para distribuirlas en trabajar y otras ocupaciones. A todas estas ¿te dedicas tiempo para estar en calma?

Cuantas personas conoces que no se mantienen quietas? eres tú una de ellas?. Una manera de amarse a uno mismo es dedicándonos tiempo de quietud y poder disfrutarlo; es lograr estar sin hacer nada sin sentir culpa (con esto no quiero decir que te vuelvas holgazán).

Nos han educado para hacer y poco para ser. Es evidente que debe haber una ecuanimidad entre ambos, sin embargo descuidamos el segundo copándolo de todo hasta convertirnos en marionetas de las cosas que tenemos que hacer y no damos espacio a la mente para empezar a desconectarse para descansar. Sin embargo podemos re- educarnos para dar valor al estado de quietud que el cuerpo y la mente tanto demandan pero que dejamos a un lado por sentimientos de culpa que nos invaden por no estar activos.

Los italianos suelen usar y aplicar una frase muy conocida; "Il dolce far niente" que traduce algo así como la dulzura de no hacer nada. Esto convierte los momentos de No productividad en momentos de placer, tomando en cuenta también que las ideas brotan en la calma y no en la locura.

El Psicólogo y Neurocientífico Dr. Daniel levitin se ha dedicado a estudiar el funcionamiento de la mente humana y explica que nuestro cerebro tiene dos modos dominantes de atención: el positivo y el negativo; activándose el primero cuando nos enfocamos en llevar a cabo una tarea concreta y el segundo cuando permitimos el deambular de nuestros pensamientos.

Desde ahora permítete ratos de vagabundeo mental e intenta hacer esto sin remordimiento:
  • En un día libre duerme mas de lo que acostumbras.
  • Si tu reloj interno te despierta, disfruta de ver el techo o sentir la suavidad de tus sabanas.
  • Mira por la ventana solo para apreciar.
  • Escucha música y siente la melodía.
  • Sal a pasear sin un rumbo determinado.
  • Túmbate en un césped y disfruta el silencio.
  • Regálate un masaje en un spa.                                      
Tu eres y serás la única persona que cargará consigo misma hasta el final de sus días, así que ponte en marcha y no te lamentes cuando estés disfrutando del tiempo que te dedicas; recuerda que el hacer nada es una acción productiva y placentera para el cerebro que tu cuerpo agradecerá.  Anímate, te lo mereces!